Ofrecemos supervisión técnica a equipos técnicos tanto del ámbito de protección a la infancia como del ámbito educativo y de intervención social. Creamos espacios de supervisión donde el rigor técnico en la intervención vaya unido al cuidado humano a los equipos. Se pueden revisar casos prácticos de especial dificultad, pero también programas de intervención o dificultades de funcionamiento de los equipos.
El cuidado a los equipos y los espacios de crecimiento personal son condición para la consciencia. Una consciencia sobre tres ejes: el dolor de las personas a las que se acompaña, sean niños, niñas y adolescentes o personas adultas; el proceso personal que ese dolor genera en quienes ejercen roles de cuidado y educativos y la consciencia sobre el entorno como un elemento de la intervención.